Sideboard ha sido diseñado con formas simples para cumplir su función de almacenamiento a la vez que pasa desapercibido.
Su silueta mínima hace que el foco de la atención vaya a otras piezas de mobiliario que se encuentren en el mismo ambiente; sin embargo, su amplia variedad de colores permite que también funcione como elemento que añade un toque de vida al espacio.